Un local ubicado en la segunda cuadra de la calle Espinar fue clausurado por la Gerencia de Servicios a la Ciudad tras detectarse graves incumplimientos a las normativas municipales.
El establecimiento, que tenía licencia como cevichería, no contaba con insumos ni evidencias de preparación de alimentos. En su lugar, se encontraron más de 10 personas consumiendo licor.
Durante el operativo, algunos asistentes en estado de ebriedad agredieron física y verbalmente al personal de fiscalización. Ante esta situación, la dueña del local optó por retirarse para evitar mayores sanciones. Además, se constató que el negocio no poseía el certificado de Inspección Técnica de Seguridad en Edificaciones (ITSE), motivo que llevó a su clausura inmediata.